Está bien que los fundadores de criptomonedas admitan la derrota y devuelvan los fondos recaudados al mercado. Y en mi opinión, no sucede lo suficiente. Onchain es una espada de doble filo, su velocidad puede acelerar una startup o exponer sus debilidades. A veces, el ritmo de onchain no coincide con las expectativas de un fundador. Otras veces, la atención es abrumadora. Y en ocasiones, un mal día de lanzamiento puede descarrilar toda la trayectoria de un producto. En cualquiera de estos casos, la decisión correcta es devolver el dinero. Mantenerte a ti mismo y a tus patrocinadores como rehenes solo retrasa lo inevitable. Cuanto más rápido aceptes la realidad, más rápido podrás reiniciar y concentrarte en lo que sigue.