"Eso es tan orwelliano" es un cliché muy cansado, pero "creo en la libertad de expresión a menos que uses la palabra fascista, en cuyo caso sufrirás todo el poder del castigo estatal" es algo con lo que creo que George estaría orgulloso de haber ideado. El principio sería algo así como: Los derechos del gobierno totalmente-no-autoritario para comportarse de manera autoritaria se otorgan siempre que y donde el público acuse al gobierno de comportarse de manera autoritaria.