Las remesas globales (personas que envían dinero a casa en el extranjero) representan 900 mil millones en flujos de dinero internacionales anualmente, con el mercado capturado principalmente por bancos, Western Union y MoneyGram; cobrando tarifas del 7-20% más un aumento excesivo en el intercambio y, a veces, reteniendo dinero durante días, manteniendo como rehenes a más de 800 millones de dependientes en 60+ economías emergentes. Cambiar incluso la mitad de eso a Dogecoin ahorraría un potencial de 50 mil millones (más dinero en los bolsillos de las familias), un paso para sacar a los más vulnerables de la pobreza. El efecto aproximado de agregar ese rendimiento a la red Dogecoin, si se asume que TPS es una medida de utilidad, sería un aumento del 260% en el valor real de la economía de Dogecoin. Solo digo.