Trabajar en criptografía no es para la gente común. Las criptomonedas te rompen o te definen... a menos que elijas un tercero: Crecer. La presión, el estrés y el caos que experimenté no se parecen a ninguna otra industria. Aquí está el truco, no se detiene. Alguna vez. Una cosa tras otra. La mierda sucede una cosa tras otra. Tienes que ser resistente y no puedes dejar que estos momentos te definan. Tienes que ser lo suficientemente fuerte mentalmente como para no enfrentarlo. Tienes que disfrutar enfrentándote a lo siguiente tras otro. Si quieres trabajar en criptografía, no puedes ser humano. Tienes que ser algo más.