Cuando Megyn Kelly fue despedida de NBC en 2018 por sus comentarios sobre la cara pintada de negro al aire, pensé, sí, lo entiendo: las empresas tienen derecho a hacer lo que necesiten. (Ella se disculpó por cierto). Cuando Kimmel fue despedido el otro día, pensé que sí, lo entiendo, las empresas tienen derecho a hacer lo que necesiten. Nunca pensé que esto fuera una violación de la libertad de expresión, es una decisión comercial.