Este año: Exch desaparecido. Ahora: TradeOgre desmantelado, $56M incautados por la RCMP. El patrón es claro: si una plataforma te permite comerciar sin entregar tu pasaporte y selfie, se trata como una empresa criminal. Y las monedas que alguna vez la tocaron estarán "contaminadas" para siempre por los sistemas de AML. Pero seamos honestos: la privacidad ≠ crimen. Proteger tu privacidad financiera es lo mismo que proteger tu seguridad. Al cerrar los intercambios sin KYC, los reguladores no matan la privacidad, aceleran el impulso hacia DEXes imparables para Monero, Zcash, Firo y más allá. Código sin CEOs. Protocolos sin servidores. Herramientas que no pueden ser incautadas. Cuanto más aprietan, más fuertes se vuelven estos equipos. Cerrar TradeOgre no detendrá la privacidad. Solo demuestra por qué necesitamos DEXes que no pueden ser incautadas. La privacidad no es crimen.